Ya has llegado al final de tu demanda por lesiones personales. Ya sea que llegaste a un acuerdo o te fuiste a juicio, y has recibido una compensación monetaria significante. Después del estrés de tu demanda, estás listo para terminar y seguir adelante con tu vida. ¿Pero qué pasa con el IRS? Con la temporada de impuestos ya sobre nosotros, te estarás preguntando si el gobierno se queda con algo de lo que tu recibiste.
En la mayoría de los casos, tu compensación por lesiones personales no estará sujeta a impuestos federales. La misma regla general se aplica a los impuestos del estado de Georgia. El tratamiento fiscal de tu compensación será el mismo, sin importar si la obtuviste por un acuerdo o te fuiste a juicio. Sin embargo, ten en cuenta que las compensaciones son complejas. Están destinadas a compensar al demandante de varias maneras diferentes. Como resultado, las compensaciones a menudo contienen elementos gravables y no gravables. Vamos a examinar los dos casos.
La parte de tu acuerdo que te compensa por tus lesiones físicas es generalmente libre de impuestos. Uno de los tipos más importantes de daños incluidos en esta categoría son los gastos médicos. Daños por dolor, sufrimiento, y el estrés emocional se encuentra también libre de impuestos. Sin embargo, para calificar, deben de ser directamente relacionados con tus lesiones físicas. Acuerdos y compensaciones pueden cubrir también daño a la propiedad a resultado de tu accidente. El IRS y el Estado de Georgia ven todo esto como una forma de reembolso a la víctima. Como resultado, en la mayoría de los casos, son libres de impuestos.
Hay algunas excepciones importantes. Una importante es la perdida de salarios. Si hubieras trabajado (si la lesión no hubiera pasado) hubieras ganado ese dinero y hubieras pagado impuestos sobre él. Como resultado, cualquier porción de la compensación o acuerdo que cubre los salarios perdidos será sujeto a impuestos.
Otro hecho sujeto a impuestos surge donde los demandantes deducen los gastos médicos en las declaraciones previas de impuestos. Si cancelaste estos gastos, cualquier compensación que recibas por ellos probablemente serán sujetos a impuestos.
Daños punitivos, que se adjudican en algunos casos para castigar a la parte responsable, probablemente van a ser sujetos a impuestos. El IRS considera estas compensaciones como adicionales a los costos reales sufridos por el demandante. Ciertos daños no-económicos no relacionados directamente con la lesión, como estrés emocional, también probablemente serán sujetos a impuestos.
Como mencionamos anteriormente, muchas compensaciones combinan componentes gravables y no gravables. Vas a necesitar entender cual es cual para propósitos de impuestos. También, podrías necesitar demostrar al IRS cual es cual. De lo contrario podrías someter toda tu compensación a impuestos. Asegúrate de hablar con tu abogado acerca de esto para que tu declaración de impuestos sea mucho más sencilla de hacer.
Estos y otros asuntos fiscales pueden convertirse rápidamente en algo abrumador y agregar más estrés a una situación ya difícil. Afortunadamente, estas son estrategias para hacer que los impuestos sobre tu indemnización por lesiones personales sean más fáciles de administrar. Una de las posibles maneras de hacer esto es usando lo que se llama acuerdos estructurados. Estos acuerdos se pagan al demandante con el tiempo y pueden ayudar a reducir las facturas de impuestos. Otra importante manera para abordar las implicaciones fiscales es dividir la indemnización en la parte compensatoria y la parte punitiva. Esto hará más fácil demostrar al IRS cuales son los daños sujetos a impuestos y cuáles no.
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